La gestión del riesgo en las actividades no bancarias, tales como gestión de activos, pensiones, compañías de seguros e inmobiliario, se estructura siguiendo los principios generales del modelo de relación entre el área corporativa de Global Risk Management (GRM) y las unidades de riesgos de las áreas de negocio.
La unidad corporativa de Riesgos No Bancarios tiene entre sus principales objetivos el establecimiento de políticas de riesgo y procedimientos, así como la colaboración en el desarrollo de metodologías y herramientas para la estimación de riesgos, aplicando técnicas homogéneas que generen proyecciones comparables y agregables con el resto de riesgos del Grupo. Las unidades de riesgo de las áreas de negocio son responsables de la implantación del modelo, del seguimiento y del control.
La estrecha relación de estas unidades con el área corporativa de GRM de Riesgos, la definición de las políticas y su implantación han permitido un riguroso control de los riesgos en un año que ha venido marcado por la crisis de la deuda soberana en la eurozona.
En el Grupo BBVA el capital económico es la métrica homogénea de cuantificación del riesgo y la base para las estimaciones de rentabilidad ajustada al riesgo. Al cierre del ejercicio 2011, se calcula que las actividades de seguros, pensiones y asset management (AM) tienen un capital económico de 1.214 millones de euros, cuya distribución por cada una de estas actividades se detalla más adelante.