Entre enero y marzo de 2012, los gastos de explotación ascienden a 2.585 millones de euros, es decir, ralentizan su tasa de variación interanual hasta el +9,6% (en el entorno del +11% tanto en el primer como en el cuarto trimestre de 2011). Esto se debe a que el mayor esfuerzo inversor que se viene realizando, fundamentalmente en las geografías emergentes, se ha producido en trimestres previos. Lo anterior, junto con el buen desempeño de los ingresos, fundamentalmente de los de carácter más recurrente, permite mantener el ratio de eficiencia estable, un 47,5% en este trimestre frente a un 48,4% del año 2011, y continuar siendo uno de los más bajos del sector a nivel mundial.
Los gastos de personal son un 1,8% inferiores a los del cuarto trimestre de 2011, a pesar del leve incremento del número de empleados en el trimestre (+0,6% hasta las 111.306 personas). Por su parte, las oficinas suben ligeramente, de 7.457 a cierre de diciembre de 2011 a 7.466, debido a su incremento en México y en América del Sur. El mayor incremento de unidades se vuelve a producir en los cajeros automáticos, 213 más en el trimestre hasta los 19.007. En este sentido, el esfuerzo por parte del Banco tanto en número como en tecnología sigue siendo notable, ya que se considera al cajero como uno de los elementos diferenciadores en su estrategia multicanal.
En resumen, el margen neto trimestral alcanza una cifra de 2.862 millones de euros y muestra una elevada resistencia si se compara tanto con el del primer trimestre de 2011 (2.904 millones) como con el del cuarto trimestre del ejercicio previo (2.863 millones). Esa generación recurrente y resistente de margen neto sienta unas bases sólidas que permitirán absorber con holgura las provisiones a realizar por deterioros adicionales del valor de los activos inmobiliarios.